¿COMPRENSIÓN...?

Hola, amigos. Después de insertar en mi blog los dos articulitos (¿CABE LA TRISTEZA EN NAVIDAD? Y EL CRUCIFIJO EN LAS ESCUELAS), he reflexionado un poco más y a favor de los hombres. Resulta relativamente fácil enjuiciar actitudes, comportamientos, incluso ideologías de un lado y de otro. Puesto a pensar sosegadamente observo que tal vez deje de lado, y eso no es ni justo ni bueno, ni siquiera humano, el contenido riquísimo de la COMPRENSIÓN HACIA LOS DEMÁS. Claro que sí, y muy cierto, que todos nos debemos comprensión, mucha comprensión y a toneladas. Los talentos de las personas son variados y diversos en cantidad y matices. Y esto nos obliga al respeto más riguroso, a la solidaridad en todo momento, y a las disculpas más sinceras en cada comportamiento humano.
El tiempo se encarga de hablar, de darnos la razón o de quitárnosla. Detrás de cada tormenta viene la calma. Los principios más fundamentales de la vida y convivencia confiamos que se mantendrán firmes e inquebrantables. Los principios religiosos de FE, afortunadamente, son incambiables. Claro que la FE es un regalo, un don, que puede convertirse en guía, si la dejamos actuar en nuestras vidas. No quita, por supuesto, que omitamos jamás la comprensión hacia los hombres, pensemos de una forma o de otra. Todo acto es de nuestra propiedad e imputable a cada uno de nosotros. Lo importante es que cada acción humana esté impulsada de buena fe y de las más sanas intenciones. Que por lo menos el humanismo y la solidaridad estén presentes en nuestros comportamientos. Pienso que quede claro que nos debemos unos a otros y sin límite de tiempo la COMPRENSIÓN. Con ella la convivencia será mucho más que una balsa de aceite.
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