¡¡ADIÓS, AÑO 2009!!

Ya quisiera poder atar todos los pensamientos que me vienen en estas últimas horas del año 2009; hacer un manojo bien preparado y… No, echarlo al fuego o al contenedor…, no, sería un despropósito, un disparate, en mi interior, una ingratitud. Primero daré gracias por los 365 días; han sido días de vida, unos mejores, otros, tal vez, plagados de sombras, incluso de lágrimas. Pero quiero dar gracias porque han formado parte de un regalo más de mi propia vida. Cogeré aquel manojo de todos los colores y vivencias, y lo guardaré en la vitrina de mis recuerdos.

Dar gracias, lo primero.

Me solidarizo también con tantos hombres que han padecido y continúan padeciendo miserias humanas. Son incontables y dentro de mis fronteras. A todos mi grito de esperanza.

Sé de sobra que los males, muchos de ellos, no vienen así porque sí. Tienen autores, por escribir solamente una expresión, y me atrevo a sugerirles el refrán de toda la vida, que, nunca mejor que esta vez, puede servirles: “lo que no quieras para ti, no se lo desees a los demás”. Todos queremos trabajo, vida y bienestar social. “Y al buen entendedor le sobran las palabras”.

Que el Nuevo Año, 2010, cuente, de nuestra parte, con el mejor y más reconfortante apoyo e impulso, LA ESPERANZA Y LA ILUSIÓN.

¡¡BIENVENIDO, AÑO NUEVO, 2010!!